Agradecimiento a la Directora del Instituto Brianda de Mendoza, Inma Carlero, por su invitación. El pasado día 22 de junio, tuve el honor de apadrinar a los alumnos que se graduaron en el Salón de Actos del Instituto Brianda de Mendoza. Aunque no hay personas ejemplares en su totalidad, creo que hay ejemplos de lo bien hecho, aunque no me considero, sinceramente, ejemplo de casi nada. Durante veinte minutos, hablé sobre, identificación, orígenes, personalidad, implicación, perseverancia, responsabilidad, trabajo y familia. Hice un recorrido por las etapas de mi vida en las que, precisamente, lo que he dicho tuvo una gran importancia, sobre todo, decisiones decisivas de mis padres Mis últimas palabras para cerrar mi intervención fueron dirigidas a los alumnos que se graduaban: «Luchar, ser vosotros mismos, no tengáis miedo a implicaros, pues el miedo y la falta de confianza nos atenazan y atentan contra nuestra libertad. No olvidéis nunca vuestros orígenes y sabed que vuestro principal apoyo es la familia». La verdad es que disfruté mucho observando a parte del futuro de nuestro maltrecho país. Mucha suerte a todos.
